Tener un bebé en casa es una experiencia maravillosa para los padres, se requiere de mucho amor y paciencia para conocer e identificar qué le sucede a tu bebé cuando llora, una de las causas por la cual un bebé no para de llorar es porque su barriguita está llena de gases y cólicos que le causan dolor.
Esto se debe a que el estómago del bebé aún es muy inmaduro y se está comenzando a acostumbrar a la alimentación que recibe fuera del vientre materno.
Normalmente, los cólicos del lactante comienzan dos semanas después del nacimiento, se notan fácilmente porque tu bebé empieza a ponerse rojo, llora, cierra los puños, arquea la espalda y sube sus rodillas a la barriga.
A continuación te explicamos cómo identificar si tu bebé está sufriendo de gases y cólicos:
- Episodios inconsolables de llanto: Un bebé que sufre cólicos llora casi a la misma hora todos los días, generalmente por la tarde o por la noche. Los episodios de cólico pueden durar unos minutos o llegar a durar tres horas o más.
- Llanto intenso: El llanto de los cólicos suena como un llanto lleno de angustia y es muy intenso, con una tonalidad muy alta. El rostro del bebé puede ponerse muy rojo y es muy difícil consolarle.
- El llanto se produce sin razón aparente: cuando tu bebé no tiene una razón aparente para llorar, porque ya comió, su pañal está limpio y todo parece estar bien entonces es muy posible que su llanto se deba a los gases.
- Cambio de postura: Un bebé con cólicos puede tener los puños cerrados, las piernas subidas hacia el vientre y los músculos abdominales tensos.
Con Gasycol aliviarás todas las molestias causada por los gases y cólicos del bebé, solo debes darle a tu pequeño de 5 a 8 gotitas antes de cada comida y tu bebé estará mejor.
Aunque los cólicos no son algo dañino para su salud, son muy molestos para el bebé.